Es imposible celebrar un torneo de judo en Rusia sin un buen combate y buena prueba de ello fue la primera jornada del Grand Slam de Kazán.
PUBLICIDADEl judo regresó a Rusia durante la primera jornada del Grand Slam de Kazán yla favorita, Irina Dolgova, se enfrentó en la final de la categoría de -48 kilos a la antigua campeona del mundo Funa Tonaki. Pero a pesar de enfrentarse a la judoca local la japonesa se mostró segura de sí misma y la derribó para asegurarse la medalla de oro.
Le entregó la medalla Marius Vizer, presidente de la Federación Internacional de Judo.
Y de una antigua campeona del mundo a un vigente campeón. En la categoría de -60 kilos Lukhumi Chkvimiani volvía a estar en forma. No habiendo subido al podio desde el mundial, el georgiano se mostró encantado de haberse hecho con el oro. ¿Podrá defender con éxito el título en el mundial de Budapest?
Sergey Soloveychik, vicepresidente de la Federación Internacional de Judo le entregó la medalla.
Otra campeona del mundo y una de las mayores estrellas del del judo volvió a brillar. Después de una actuación muy trabajada en Taskent el mes pasado Uta Abe mostró su bello estilo de judo una vez más. Una gran técnica y una gran sonrisa de la que se convirtió en nuestra mujer del día.
Le colgó la medalla Jean Luc Rouge, secretario general de la Federación Internacional de Judo.
Murad Chopanov se enfrentó al bieloruso Dzmitri Minkou en el que era el combate más esperado para los seguidores rusos. Chopanov se aseguró el primer oro del torneo para Rusia y convirtiéndose en nuestro hombre del día.
Le entregó la medalla el vicepresidente de la Federación Rusa de Judo, Mikhail Cherkasov.
Las esperanzas rusas se vieron frustradas en la categoría de -57 kilos cuando la número dos del mundo, la francesa Helene Receveaux, derrotó a una de las mejores judocas de la categoría, Daria Mezhetskaia. Receveaux se mostró feliz de llevarse su primera medalla de oro en un Grand Slam en 6 años.
El presidente de la Federación de Judo de la República de Tartaristán, Pavel Nikolaev, le entregó la medalla.
Es imposible celebrar un torneo de judo en Rusia sin un buen combate. Con una nación tan dinámica en este deporte, no quedó una piedra sin remover en el intento de conseguir el mayor logro del judo, el ippón.