Taiwán recibe la primera visita oficial de eurodiputados en un momento de delicadas relaciones entre China y la UE.
PUBLICIDADUn grupo de siete eurodiputados están de visita oficial en Taiwán por primera vez. Se trata de un movimiento controvertido ante el que el gobierno chino ha manifestado su desaprobación. Las relaciones entre Pekín y Taipéi siempre han sido delicadas ya que China reclama la soberanía sobre la isla.
La delegación, entre la que se encuentran eurodiputados que fueron sancionados por China, se ha reunido con el primer ministro taiwanés, Su Tseng-chang. "Y creo que el mundo no ha entendido bien, todavía, lo difícil y valiente que es construir una democracia bajo la amenaza de un régimen autoritario como el de Pekín", ha explicado uno de los eurodiputados que ha participado en el viaje, Raphaël Glucksmann.
A principios de este año, Pekín impuso sanciones a varios eurodiputados, entre ellos a Glucksmann, después de que Bruselas sancionara a funcionarios del régimen comunista vinculados al encarcelamiento, trabajo forzado y genocidio de la comunidad musulmana de los uigures en la región de Xinjiang.
Los eurodiputados insisten en que la visita es necesaria para construir relaciones con las democracias cercanas a China, que también están preocupadas por su interferencia política y desinformación. “Es claramente una señal de que ahora algunas partes de la maquinaria de Bruselas se toman mucho más en serio los asuntos de Taiwán y Taiwán. También también muestra que Europa está preocupada, y creo que eso se ha generalizado por las tensiones que están aumentando en el Estrecho de Taiwán entre la China continental y Taiwán. Además, creo que es algo que va a hacer que crezca la atención en Pekín y esperamos reacciones de Pekín diciendo a los europeos que esto tiene que parar y que es un violación del principio de una sola China", explica Mikko Huotari, del Instituto Mercator para Estudios de China.
El gobierno chino dice que la visita "violaría gravemente el compromiso de la UE con la política de una sola China y debilitaría el sano desarrollo de las relaciones entre China y la UE".
Taiwán está intentando expandir sus esfuerzos diplomáticos en Europa. Su ministro de Relaciones Exteriores visitó Bruselas la semana pasada, donde se reunió con eurodiputados y miembros del parlamento belga. Pero no pudo reunirse con los presidentes de la Comisión Europea y del Consejo Europeo. Una muestra de como de delicadas son ahora las relaciones entre la UE y China.