Deberán permanecer bajo arresto domiciliario; la detención de los dos hombres que alegan su inocencia y denuncian su encarcelamiento, se había prorrogado varias veces y por última vez el 22 de marzo, siempre a petición de los fiscales.
PUBLICIDADEl influencer británico-estadounidense Andrew Tate y su hermano Tristan, detenidos a finales de diciembre en Rumanía por un caso de proxenetismo, fueron puestos en libertad en apelación el viernes y estarán bajo arresto domiciliario, según una decisión de los jueces confirmada a la AFP por la fiscalía.
"Se rechaza la propuesta del fiscal de prolongar la detención preventiva" y "se sustituye esta medida cautelar" por el "arresto domiciliario" con efecto inmediato, ordenó el viernes el tribunal de apelación de Bucarest.
La detención de los dos hermanos, que alegan su inocencia y denuncian su encarcelamiento, se había prorrogado varias veces y por última vez el 22 de marzo, siempre a petición de los fiscales.
Su defensa ha denunciado regularmente desde su encarcelamiento un caso vacío, sin pruebas tangibles, y ha refutado cualquier riesgo de salida al extranjero, argumentando que los vínculos de sus clientes con el país. Tristan Tate es padre de un bebé nacido durante su detención.
De campeón del mundo de kickboxing a "rey" de Twitter
Junto con ellos también fueron liberadas dos mujeres rumanas, una ex policía y la novia de Andrew Tate. Habían sido detenidas junto a ellos el 29 de diciembre durante una operación a gran escala llevada a cabo tras varios meses de investigación.
Andrew Tate, de 36 años, y Tristan, de 34, son sospechosos de haber embaucado a "varias víctimas, entre ellas menores", con fines de "explotación sexual", en particular para la producción de películas pornográficas, según la fiscalía encargada de la lucha contra la delincuencia organizada (DIICOT).
Andrew Tate fue campeón del mundo de kickboxing. Saltó a la fama por primera vez cuando apareció en el reality show británico Gran Hermano en 2016. Pero fue eliminado rápidamente después de que se difundiera un vídeo en el que aparecía pegando a una mujer.
Entonces se volcó en las redes sociales y tiene millones de seguidores en línea. Allí promueve puntos de vista masculinistas, fascinando a los adolescentes del mundo anglosajón y más allá con sus abultados músculos, los puros que fuma y sus coches caros. Su nombre es uno de los más buscados en Google.
En el pasado fue suspendido de varias redes sociales por comentarios misóginos. Su cuenta de Twitter, seguida actualmente por 5,4 millones de seguidores, fue restablecida cuando la red social fue comprada por el multimillonario Elon Musk.
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