La contraofensiva ucraniana hacia Crimea mueve la línea de frente, con el temor de la llegada del otoño y evacuaciones de niños en Zaporiyia y Kupiansk.
PUBLICIDADEn Ucrania, en la recién reconquistada ciudad de Robotyne, este grupo de operadores de drones ucranianos trabaja a toda prisa. Aunque la contraofensiva va más lenta de lo esperado, según el Gobierno ucraniano, el control de esta ciudad abre el camino hacia el sur, hacia la península de Crimea. Pero las tropas rusas resisten. Un proyectil cae junto al grupo, que abandona el lugar en busca de otro punto de ataque.
Temor ante la llegada del otoño y la amenaza del barro y el frío
La misma sensación de premura se respira en el aire, en las pocas localidades del frente sur, que las tropas ucranianas han liberado de la ocupación rusa en el oblast de Donetsk. Las carreteras muestran los restos de combates y casas en ruinas alineadas a ambos lados.
Entre las ruinas de los combates, los soldados saben que el otoño está a la vuelta de la esquina, y con él las lluvias y el barro, que frenarán cualquier avance de los tanques.
Evacuaciones en Zaporiyia y Kupiansk
También se están llevando a cabo rápidamente evacuaciones de las localidades cercanas a la línea de frente. En la región de Zaporiyia, decenas de familias con niños han sido evacuadas a zonas más seguras.
En Kupiank el peligro es inminente. Mientras Ucrania intenta abrirse paso hacia el sur, el Ejército ruso trata de atravesar sus defensas en esta parte norte del país que las tropas ucranianas recuperaron en una contraofensiva relámpago hace casi un año.