Ibrahim Al-Agha había planeado realizar una breve visita, pero se ha visto atrapado por la guerra. Ha sentido el deber de abrir sus puertas a decenas de ciudadanos de Gaza que han sido desplazados.
PUBLICIDADLos palestinos que huyen de los bombardeos en Gaza han buscado refugio en distintos lugares. La mayoría se ha trasladado al sur, otros se han refugiado en hospitales o centros escolares de la ONU. Varios han ido a casa de un ciudadano palestino-irlandés, creyendo que él, como extranjero, no será objetivo de ataques. Nebal Hajjo, corresponsal de Euronews, ha hablado con algunos de ellos y con su anfitrión.
"No sabía qué hacer, la gente empezó a huir hacia el sur. Mis familiares y yo huimos. Teníamos miedo. Dejamos todo atrás: nuestra casa, nuestras camas, la comida que estaba en los fogones... nos costó encontrar un coche. Lo importante fue que escapamos, y nos salvamos", declaraRami Mahfouz, residente en Gaza que ha sido desplazado.
"Los dos primeros días fueron difíciles para nosotros, ya que no nos conocíamos, todos teníamos miedo y estábamos nerviosos. Después, el más veterano y sabio nos ayudó a unir nuestros puntos de vista, y a juntar nuestro dinero para compartir los gastos cotidianos de la vida. Cada uno de nosotros aportó 30 séqueles para comprar comida", explicaHammam Al-Afrangi, otro de los residentes en Gaza que han sido desplazados.
Ibrahim Al-Agha había planeado realizar una breve visita, pero se ha visto atrapado por la guerra. Ha sentido el deber de abrir sus puertas a decenas de ciudadanos de Gaza que han sido desplazados.
"Mi mujer, mis tres hijos y yo vinimos a Gaza. Por desgracia, nos quedamos atrapados aquí. La situación es muy difícil. Como pueden ver, acogemos a muchos amigos y familiares. Tenemos un gran problema: quizá hayan observado nuestra batalla con la comida, el agua, la electricidad... y también con intentar entretener a los niños. Es una lucha diaria, desde por la mañana hasta que nos vamos a dormir. Es una batalla diaria, únicamente, para satisfacer nuestras necesidades como grupo", señala el ciudadano palestino-irlandés, Ibrahim Al-Agha.