Según medios locales, un individuo ha descubierto huesos, incluido un cráneo, en la zona donde desapareció.
PUBLICIDAD
Las autoridades francesas han encontrado los restos de un niño que desapareció en julio del año pasado. Partes del cuerpo del pequeño Émile Soleil, de dos años y medio, fueron encontradas en la misma zona donde desapareció mientras estaba en casa de sus abuelos.
Según medios locales, un individuo descubrió huesos, incluido un cráneo, el sábado cerca de Le Vernet, en los Alpes de Alta Provenza, un pueblo de unos 25 habitantes que está rodeado de bosques y campos.
Los representantes de la Gendarmería no han desvelado ningún detalle, ya que la investigación aún está en curso. Hace una semana, la Policía empezó una búsqueda intensa en el área, pero en ese momento no se encontró ningún rastro del niño.
Su desaparición ha conmocionado a todo el país y todavía quedan muchas preguntas por responder. De momento, las autoridades no han querido descartar ninguna posibilidad y esperan que el análisis del cadáver del niño puede esclarecer las circunstancias de su muerte.