Venecia ha anunciado recientemente una serie de medidas innovadoras para abordar los desafíos del turismo masivo después de su prueba piloto. Estas iniciativas buscan mejorar la calidad de vida de los residentes y preservar el patrimonio cultural de la ciudad.
PUBLICIDADA partir de agosto, se implementará una limitación en el tamaño de los grupos turísticos, reduciéndolos a un máximo de 25 personas. Esta medida, que excluye a los niños menores de dos años, representa aproximadamente la mitad de la capacidad de un autobús turístico convencional. Además, se ha establecido una prohibición del uso de altavoces para guías turísticos, con el objetivo de reducir la contaminación acústica en la ciudad. Saltarse estas medidas podría conllevar multas de entre 25 y 500 euros.
Elisabetta Pesce, funcionaria encargada de la seguridad en Venecia, ha explicado que estas políticas están diseñadas para mejorar el flujo de visitantes no solo en el centro histórico de la ciudad, sino también en las populares islas de Murano, Burano y Torcello.
En un esfuerzo adicional por regular el turismo, Venecia ha anunciado planes para implementar una tarifa diaria para visitantes de 5 euros por persona. Esta medida se aplicará durante 29 días de alta afluencia entre abril y mediados de julio, incluyendo la mayoría de los fines de semana. El objetivo es fomentar estancias más largas y mejorar la experiencia tanto para turistas como para residentes.
Turismo masivo, la gran preocupación de muchas ciudades
Estas medidas surgen en un contexto de creciente preocupación por el impacto del turismo masivo en Venecia. La UNESCO ha considerado en dos ocasiones incluir a la ciudad en la lista de patrimonio en peligro, citando el turismo como un factor determinante. La implementación de estas nuevas regulaciones ha sido crucial para que Venecia evite esta categorización.
La ciudad ha demostrado su compromiso con la sostenibilidad al limitar la llegada de grandes cruceros a través del Canal de Giudecca y al anunciar la implementación de la tarifa para visitantes diarios, una medida que se había retrasado debido a la disminución del turismo durante la pandemia de COVID-19.
Estas iniciativas reflejan un enfoque integral para abordar los desafíos del turismo masivo, equilibrando las necesidades de la industria turística con la preservación del patrimonio cultural y la calidad de vida de los residentes venecianos. A medida que estas medidas se implementen, se espera que Venecia pueda mantener su estatus como destino turístico de clase mundial, al tiempo que protege su inigualable belleza y patrimonio para las generaciones futuras.