El expresidente Donald Trump ha vuelto a denunciar un fraude electoral generalizado, haciéndose eco de sus afirmaciones de las elecciones de 2020, pero sus vagas acusaciones fueron rápidamente rechazadas.
PUBLICIDAD
Donald Trump ya ha hecho afirmaciones infundadas de fraude e interferencia en las elecciones presidenciales de 2024, lanzando acusaciones contra la ciudad de Filadelfia (Pensilvania) antes incluso de que se cerraran las urnas. En un mensaje en su plataforma de redes sociales, Truth Social, Trump escribió: "Se habla mucho de trampas masivas en Filadelfia. Llegan las Fuerzas de Seguridad".
Las autoridades de Filadelfia rechazaron rápidamente sus afirmaciones, que se hacen eco de las que hizo en 2020, señalando la integridad del proceso electoral en curso. Seth Bluestein, comisionado de la ciudad de Filadelfia, calificó las afirmaciones de Trump de "infundadas" y reafirmó que las elecciones de la ciudad se están llevando a cabo de manera justa. "Estamos vigilando de cerca que no haya irregularidades para garantizar que los habitantes de Filadelfia puedan votar de forma segura", declaró Bluestein.
El fiscal del distrito de Filadelfia, Larry Krasner, también rechazó las acusaciones de Trump. En declaraciones en X (antes Twitter), señaló: "No hay base factual en estas acusaciones".
Krasner añadió: "Llevamos todo el día recibiendo quejas y denuncias de irregularidades. Si Donald J. Trump tiene algún hecho que respalde sus descabelladas afirmaciones, lo queremos ahora. Ahora mismo. No vamos a aguantar la respiración".
Filadelfia es una ciudad crucial para los demócratas, uno de los siete principales estados indecisos, que ofrece 19 votos electorales críticos que podrían ser decisivos en el resultado de las elecciones. Trump ganó por un estrecho margen Pensilvania en 2020, tradicionalmente un estado de tendencia roja, aunque con un margen muy estrecho.
Poco después de su publicación inicial, Trump volvió a subir a su plataforma, esta vez alegando que la policía también se había desplegado en Detroit, Michigan. Al igual que Pensilvania, Michigan es un estado crucial. Sus votantes también están sopesando varias contiendas competitivas a la baja que podrían afectar a ambas cámaras del Congreso y a la legislatura estatal.
En las elecciones de 2020, la campaña de Trump presentó múltiples demandas en varios estados, incluido Pensilvania, alegando fraude electoral. Este año, ha dicho que no impugnará los resultados siempre que haya "unas elecciones justas".