El grupo hutí Ansarullah anunció su disposición a atacar buques estadounidenses en el mar Rojo si participaban en un ataque contra Irán, a pesar de un entendimiento previo con Washington bajo los auspicios de Omán para detener los ataques a cambio del fin de los ataques aéreos.
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El grupo hutí Ansarullah anunció el sábado que podría reanudar las operaciones navales dirigidas contra buques estadounidenses en el mar Rojo si Estados Unidos participa en cualquier posible ataque contra Irán en cooperación con Israel.
El portavoz militar del grupo, Yahya Saree, afirmó en un comunicado publicado por los medios de comunicación del grupo: "Atacaremos los barcos y acorazados estadounidenses en el Mar Rojo si Washington participa en el ataque contra Irán", declaró, subrayando que el grupo sigue de cerca los movimientos en la región, incluidos los que describió como "movimientos hostiles", y tomará las medidas necesarias para protegerse.
El grupo considera que cualquier posible ataque israelí contra Irán tiene como objetivo "eliminar a Teherán como obstáculo para un plan israelí de dominar la región", añadió Saree, subrayando que el grupo no permitirá que se lleve a cabo este plan, dijo.
Las declaraciones se producen un día después de que Estados Unidos impusiera nuevas sanciones dirigidas contra aspectos económicos clave vinculados al grupo hutí Ansarullah y considerados de apoyo a sus actividades. También se producen en medio de una escalada de las tensiones entre Estados Unidos e Irán, en medio de especulaciones sobre un posible ataque militar estadounidense dirigido contra el programa nuclear iraní.
En este contexto, la web militar estadounidense 'The Aviationist' informó de que dos escuadrones de bombarderos estratégicos B2 partieron el viernes por la mañana de la base aérea de Whiteman, en Misuri, rumbo a la isla de Guam, en el océano Pacífico, sin indicar movimientos hacia la base de Diego García, en el océano Índico, utilizada anteriormente en operaciones similares.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció en mayo que había llegado a un entendimiento con el grupo hutí Ansarullah a través de la mediación omaní para detener las operaciones navales contra buques comerciales en el mar Rojo a cambio del fin de los ataques aéreos estadounidenses contra las posiciones del grupo y las zonas bajo su control.
Cabe destacar que el mar Rojo es una zona estratégicamente vital, por la que pasa alrededor del 10% del comercio mundial, lo que hace que una escalada en él tenga amplias repercusiones económicas y de seguridad.