Funcionarios de la ONU y líderes de 32 países en desarrollo sin litoral (LLDCs) se reunieron en Awaza, Turkmenistán, adoptando una hoja de ruta de 10 años para abordar desafíos geográficos compartidos.
Representan a una población combinada de más de medio billón de personas: los funcionarios de los LLDC –que abarcan Asia Central, África y Sudamérica– están trabajando con líderes de la ONU para afrontar los obstáculos en comercio, conectividad y resiliencia.
En la tercera Conferencia de la ONU sobre los Países en Desarrollo Sin Litoral, se adoptó el Programa de Acción de Awaza (2024–2034) fue adoptado. Establece compromisos para acelerar la facilitación del comercio, expandir la infraestructura, fortalecer la resiliencia climática y ampliar el acceso digital.
Con este nuevo plan, los socios de la ONU y los LLDC a escala mundial no solo ofrecen una hoja de ruta técnica, sino también una declaración de solidaridad entre las naciones históricamente desfavorecidas por su geografía.
Vinculados a la tierra, no aislados por ella
Para los LLDC, los obstáculos al progreso económico son claros: acceso restringido a los mercados mundiales, altos costes de transporte, dependencia de los estados de tránsito y mayor vulnerabilidad ante las crisis mundiales. Estas barreras frenan el crecimiento y obstaculizan la plena integración en el comercio internacional.
La declaración de Awaza abordó estos problemas de frente y estableció medidas para:
Ampliar los corredores de transporte multimodales y reducir los cuellos de botella logísticos.
Simplificar los procesos aduaneros y fronterizos mediante la digitalización.
Invertir en energía renovable y adaptación al clima para proteger a las economías frágiles.
Fortalecer los sistemas alimentarios y de salud para aumentar la resiliencia.
Mejorar las asociaciones con instituciones internacionales, incluidos el PNUD, el Banco Mundial y el Banco Asiático de Desarrollo.
En conjunto, estos pasos tienen como objetivo transformar a los LLDC en economías "conectadas por tierra", mejor integradas en los sistemas regionales y mundiales.
El papel central de Turkmenistán
Al acoger por primera vez la Conferencia de la ONU, Turkmenistán destacó tanto su neutralidad como su misión más amplia de conectividad regional. Desde su independencia en 1991, el país ha seguido una política exterior única: la neutralidad permanente, reconocida por las Naciones Unidas en 1995, que le permite actuar como un colaborador diplomático estable.
Al albergar este encuentro, que se celebra una vez cada década, Turkmenistán subrayó cómo la neutralidad puede impulsar la cooperación. Como señaló el Secretario General de la ONU, António Guterres, "Turkmenistán ha demostrado su generosidad en tantas ocasiones que merece la gratitud de la comunidad internacional".
Además de las sesiones formales, los delegados fueron recibidos con presentaciones culturales y fuegos artificiales en la costa del Caspio, lo que reforzó el mensaje de apertura y hospitalidad de Turkmenistán.
Asia Central, Europa y más allá
La conferencia también brindó a Turkmenistán la oportunidad de reafirmar su papel como puente entre regiones. Al reunir a líderes de África, Asia, América Latina y Europa, Awaza se presentó como una plataforma global poco común para la resolución colectiva de problemas.
Para Bruselas, el Programa Azawa se alinea perfectamente con la estrategia de la UE. Su enfoque en las cadenas de suministro, los corredores y el crecimiento verde refleja los esfuerzos de Europa por combinar la conectividad con la diplomacia climática. En su declaración de apoyo, la UE describió el programa como un elemento fundamental para avanzar en los ODS y en los objetivos del Acuerdo de París.
La UE ya está realizando una fuerte inversión en el desarrollo de los LLDC a través de su gasto en AOD de 88.700 millones de euros en 2024. Entre los proyectos recientes se encuentran terminales aduaneras y nuevos enlaces viarios en el Cáucaso, infraestructura hidroeléctrica en Nepal y el corredor ferroviario de Lobito, que conecta la RDC y Zambia con Angola. Estas iniciativas, respaldadas por el "Equipo Europa", están en consonancia con los compromisos de Awaza y pueden ayudar a convertir la visión del programa en realidad.
Mirando hacia adelante
En Awaza, los fuegos artificiales iluminaron el cielo nocturno para marcar la adopción de un plan de alcance global. Sin embargo, el éxito dependerá de traducir las declaraciones en inversiones, cambios de políticas y un impacto real en las 500 millones de personas que viven en los países sin litoral.
Al acoger la conferencia, Turkmenistán se posicionó no solo como neutral, sino como un contribuyente proactivo a la cooperación mundial. Para los 32 LLDC, el Programa de Awaza ofrece un marco para pasar del aislamiento a la oportunidad: fortalecer la resiliencia, desbloquear el comercio y redefinir su papel en el desarrollo internacional durante la próxima década.