Austria pide que la UE controle de forma más estricta sus fronteras exteriores antes de permitir a Bulgaria y Rumania unirse de forma plena a Schengen.
PUBLICIDADLa UE tiene que poner orden en sus fronteras exteriores antes de admitir de forma plena a Rumanía y Bulgaria en el area de libre circulación de Schengen. Esta es la opinión del eurodiputado austrÍaco Lukas Mandl, de ÖVP, el partido que gobierna Austria.
Euronews ha hablado con él para entender la controvertida decisión de la UE del pasado diciembre: **permitir viajar a y desde ambos países sin controles por aire y mar.**Pero manteniendo estrictos controles en las fronteras terrestres... Algo que responde a una petición de Austria, que tambien bloqueó durante meses la adhesión a Schengen de ambos países por temor a los flujos migratorios irregulares."Austria tiene un planteamiento muy constructivo y positivo. Queremos encontrar una solución. Como siempre he dicho, queremos tener a Bulgaria y Rumanía dentro del espacio Schengen", ha explicado Mandl.
"Pero todavía no es posible, porque las fronteras exteriores de la Unión Europea aún no están debidamente protegidas. Y por eso Austria ha lanzado el claro mensaje de que primero tenemos que resolver el problema de nuestras fronteras exteriores en lo que respecta a la inmigración irregular. Y después, podemos seguir adelante para terminar el espacio Schengen", ha asegurado el eurodiputado.
Austria está preocupada por el elevado número de solicitudes de asilo en su territorio, a pesar de estar rodeada por otros países de la UE.
Según las leyes europeas, si los migrantes desean pedir asilo deben hacerlo en el primer país de la UE que pisen. "Todos sabemos que esta regla no ha sido seguida por muchos Estados miembros, en una dimensión extrema por Hungría, desafortunadamente, pero también otros estados miembros no siguieron del todo la regla. Y para el futuro, hemos acordado, que Bulgaria y Rumanía se harán cargo de aquellos refugiados, que entraron primero en uno de estos dos países", ha dicho Mandl.
Ahora Rumanía y Bulgaria han acordado reforzar el control de las fronteras exteriores con el apoyo de Frontex, la agencia europea de gestion de fronteras. Y también se han comprometido a tramitar las solicitudes de asilo en su propio territorio.
Tanto Rumanía como Bulgaria se incorporarán el 31 de marzo al area Schengen en aeropuertos y fronteras marítimas. En 2024 proseguirán las negociaciones sobre los próximos pasos para poner fin a los controles en las fronteras terrestres.