Según las autoridades aduaneras, los viajeros que salen de Estonia suelen transportar mercancías que escasean en Rusia, como piezas de repuesto para automóviles y maquinaria, componentes para drones y aparatos electrónicos y de radiotransmisión.
PUBLICIDADLas autoridades estonias han registrado casi 600 infracciones desde que se introdujeron controles aduaneros completos en el paso fronterizo de Narva con Rusia a principios de agosto. Narva es un punto fronterizo muy transitado, con unos 1.500 cruces diarios de Estonia a Rusia.
A pesar del elevado número de infractores, la Dirección General de Impuestos y Aduanas afirma que el índice diario de infracciones ha descendido ligeramente, de 22 a 18, aproximadamente.
Según las autoridades aduaneras suelen transportar mercancías que escasean en Rusia, como piezas de repuesto para automóviles y maquinaria, componentes para drones y aparatos electrónicos o radio.
Deslimitar las horas de paso en Narva
Estonia introdujo controles aduaneros completos en el paso fronterizo de Narva el 8 de agosto y sigue a una decisión tomada en mayo de limitar las horas a las que pueden cruzar los peatones.
Ese cambio se introdujo después de que Rusia decidiera en febrero cerrar el paso fronterizo a los vehículos, alegando la necesidad de realizar obras en su paso fronterizo de Ivangorod.
Las autoridades estonias suponen que la situación será permanente, ya que Moscú no ha facilitado un calendario para la finalización de las obras. Rusia también introdujo restricciones en el número de peatones autorizados a cruzar a Estonia, pero no dio ninguna razón para las nuevas normas.
Dado que el paso fronterizo de Narva está cerrado a los vehículos, los viajeros pueden utilizar los pasos de Koidula y Luhamaa para conducir de Estonia a Rusia. Pero a las autoridades estonias les preocupa que Rusia pueda limitar de repente los cruces también en esos puntos, complicando aún más los viajes entre ambos países.
La Policía y la Guardia de Fronteras estonias desaconsejan todo viaje a Rusia. Las tensiones entre Rusia y Estonia, miembro de la OTAN, han sido elevadas desde la invasión de Ucrania en 2022.
Un paso fronterizo que podría cerrarse indefinidamente
Las autoridades estonias advierten de que la frontera podría tener que cerrarse a todos los viajeros en breve, lo que significa que los estonios en Rusia podrían tener que encontrar rutas alternativas para regresar a su país de origen.
Tallin afirma que, a finales de 2023, Rusia había dirigido deliberadamente hacia la frontera estonia a grupos de extranjeros que carecían del derecho legal a entrar en la Unión Europea. Eso llevó a las autoridades a advertir de que, si estas actividades continuaban, la frontera podría cerrarse para proteger la seguridad nacional y el orden público.
Finlandia cerró su frontera con Rusia el año pasado, acusando a Moscú de intentar desestabilizar Europa animando a los inmigrantes irregulares, en su mayoría procedentes de Siria y Somalia, a cruzar la frontera. El cierre se prorrogó indefinidamente en abril.