La crisis griega vuelve a acechar a Crédit Agricole este lunes en París. El valor ha caído un 2,3%, registrando un nuevo mínimo histórico de 3,55 euros. Es la bajada más fuerte del CAC 40.
No es el riesgo de impago de Grecia lo que ahuyenta a los inversores. Crédit Agricole ha reducido significativamente su exposición a la deuda helena y ha depreciado lo que queda de deuda más del 70% en su balance de 2011.
Lo que asusta a los mercados es su filial griega deficitaria, la banca Emporiki. El año pasado, Crédit Agricole registró su primera pérdida neta debido a sus problemas griegos. Emporiki tuvo un impacto contable negativo de más de mil millones de euros.
Los esfuerzos de reactivación fueron en vano, en un contexto de empobrecimiento general del país. Crédit Agricole ha pensado en ceder Emporiki, pero no encuentra comprador.
Presente en Portugal, España e Italia, Crédit Agricole es, por otra parte, uno de los bancos franceses más expuestos al contagio de la deuda soberana de las economías frágiles del sur de Europa
Esto explica que el título haya perdido más de la mitad de su valor en la bolsa el año pasado y cerca del 20% este año.
