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Era la mujer con más títulos nobiliarios del mundo, conocida como la aristócrata rebelde y también una de las habituales en las revistas españolas del corazón. En Sevilla ha muerto a los 88 años Cayetana Fitz-James Stuart y Silva, la duquesa de Alba.
Ahijada de los reyes Alfonso XIII y Victoria Eugenia, se casó por primera vez en octubre de 1947 con Luis Martínez de Irujo y Artázcoz, con quien tuvo sus seis hijos. Durante los años cincuenta se convirtió en anfitriona de figuras como Jackie Kennedy y Audrey Hepburn.
Dueña de palacios y pinturas de Goya o Velázquez y requerida como musa por Picasso, las segundas nupcias de la duquesa de Alba supusieron un escándalo al sacar de la orden de los jesuitas a quien era su confesor.
Cayetana, una profunda amante del flamenco, fue distinguida en 2010 con la Medalla de Oro al Merito en las Bellas Artes. Fue poco antes de su último y también controvertido matrimonio con Alfonso Díez Carabantes, 25 años menor que su cónyuge. Su fortuna, que se repartirá entre sus seis hijos, está estimada entre 600 y 3.500 millones de euros.