Una inyección de optimismo para los Cyborgs ucranianos, heridos en combate, en su visita a una escuela de párvulos en Kiev. Son soldados del Ejército
Una inyección de optimismo para los Cyborgs ucranianos, heridos en combate, en su visita a una escuela de párvulos en Kiev. Son soldados del Ejército ucraniano y voluntarios que defienden desde hace meses el aeropuerto de Donetsk de los ataques rebeldes. Para muchos son superhéroes.
Hace dos meses, los padres de los alumnos de esta escuela donaron dinero para repatriar y curar a los soldados heridos en el este del país. Algunos de ellos han venido a dar las gracias en persona a los pequeños, que a su vez les han mostrado su gratitud por luchar por Ucrania.
“Estos niños nos han dado tanto calor. Nos han recordado que tenemos una historia que necesitamos recordar y un futuro por el que debemos luchar”, ha declarado Boa, un soldado ucraniano que estuvo más de un mes defendiendo el aeropuerto de Donetsk y resultó herido.
Los soldados han recibido ayuda humanitaria para entregar a sus compañeros en el frente y algunos regalos de los pequeños.
“Queremos mejorar la vida de estos hombres. Les enviamos café, medicinas, ropas de abrigo y dibujos de los niños. Los niños les piden que vuelvan con vida. Ese es su principal deseo”, ha explicado Svitlana Pozikhailo, directora de la escuela.
“Les deseo felicidad, salud y ¡la victoria!”, ha dicho un niño.
Las canciones y bailes ucranianos y el entusiasmo de sus pequeños intérpretes han devuelto la sonrisa a quienes han vivido el infierno y han visto a sus compañeros morir.