Surge como una escision de Al Qaeda en Irak y se refuerza con el caos generado por la guerra civil en Siria. En 2014 el autodenominado Estado
PUBLICIDADSurge como una escision de Al Qaeda en Irak y se refuerza con el caos generado por la guerra civil en Siria. En 2014 el autodenominado Estado Islámico ha subvertido el damero geopolítico en Oriente Medio y puesto en jaque a toda la región. El grupo yihadista ha superado a Al Qaeda en el uso de la violencia y en sus métodos propagandísticos.
Avanzaron a toda velocidad sin encontrar resistencia por parte del Ejército iraquí. Los combatientes del autoproclamado Estado Islámico, armados con blindados estadounidenses abandonados por los soldados iraquíes en junio, proclamaron a finales de ese mes, un califato en una vasta zona a caballo entre Siria e Irak.
Presas, refinerías, y otros lugares estratégicos cayeron bajo su control, facilitando la financiación de esta milicia a la que sólo combaten en tierra los peshmergas, los soldados del kurdistán iraquí.
En esa región buscaron refugio los yazidíes, una minoría religiosa obligada por el grupo Estado Islámico a convertirse o morir. Miles de ellos fueron ejecutados. Otros, incluidos mujeres y niños, enterrados vivos.
Atrocidades que los miembros del grupo reprodujeron también en Siria, donde sembraron el terror con crucifixiones y decapitaciones.
Una verdadera estrategia de guerra llevada a cabo por este ejército de más de 30 mil hombres, de los que cerca de la mitad no son ni iraquíes ni sirios. Se calcula que unos 3 mil occidentales se han unido a sus filas.
En Siria se hicieron con varias grandes ciudades, cebándose especialmente con la población de Kobane. La ciudad kurda fronteriza con Turquía, defendida por los peshmergas iraquíes y los bombardeos aéreos de la coalición liderada por Estados Unidos, se convirtió en el símbolo de la lucha contra los yihadistas.