Los supervivientes del atentado y en particular el caricaturista Luz, autor de la portada, explican cómo han conseguido sacar este miércoles el número a la venta, a pesar de todo
PUBLICIDADPara conseguir hoy un ejemplar de Charlie Hebdo había que levantarse temprano. La primera edición de la revista satírica tras los atentados de París se ha convertido en un objeto de culto.
“ Tengo una lista de 50 ejemplares ya reservados para el miércoles”- decía este quiosquero. Es la norma esta mañana.
Los supervivientes del atentado y en particular el caricaturista Luz, autor de la portada, explicaron ayer en rueda de prensa cómo han conseguido sacar este número a la venta, a pesar de todo:
Luz, caricaturista de Charlie Hebdo:
“ Por encima de todo somos caricaturistas a los que les encanta dibujar personajitos, como cuando éramos niños. Todo el mundo, incluidos los terroristas, fueron niños alguna vez y también dibujaron como nosotros, como cualquier niño. Así que pienso que- los terroristas- en algún momento de su vida perdieron el sentido del humor, perdieron su alma de niño, que es lo que te permite ver el mundo desde una cierta distancia. Eso es lo que hacemos en Charlie Hebdo, ver el mundo desde una cierta distancia”
Está mañana el semanario estará en todos los quioscos de Francia gracias a una solidaridad sin precedentes. Los dibujantes han trabajado en oficinas y con equipos prestados por el diario Liberation y los repartidores no cobrarán su comisión habitual. De las 60.000 copias de antaño, Charlie Hebdo ha pasado esta mañana a 3 millones de ejemplares.
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