La visita a Crimea de una delegación de parlamentarios franceses ha indignado a Kiev y molestado a París. Diez diputados y senadores galos llegaron a
La visita a Crimea de una delegación de parlamentarios franceses ha indignado a Kiev y molestado a París.
Diez diputados y senadores galos llegaron a este antigua región ucraniana, anexionada por Rusia el año pasado, procedentes de Moscú.
El jefe de la delegación, el diputado conservador Thierry Mariani, defendió el referéndum en el que una mayoría de sus residentes votaron por integrarse en la Federación Rusa. Consulta considerada ilegal por la comunidad internacional.
Mariani destacó que él y otros parlamentarios franceses opinan que el retorno a Rusia de Crimea “es absolutamente lógico” y pidió el levantamiento de las sanciones impuestas por Bruselas y Washington a Moscú.
“No vemos fuerzas militares de ocupación. No vemos gente que esté siendo forzada. Hace falta tiempo para cambiar una imagen, pero puedo decirles que la imagen que vamos a transmitir es una imagen diferente”, ha declarado Mariani.
Antes de viajar a Crimea, la delegación gala se había reunido con el presidente de la Duma rusa.
Para el embajador ucraniano en París esta visita es “una violación del derecho internacional” y “una falta de respeto a la soberanía e integridad territorial de Ucrania”.