Israel encarcela a un extremista judío sospechoso del ataque que mató un bebé el viernes pasado. Se trata de Mordechai Meyer, un colono que vive en
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Israel encarcela a un extremista judío sospechoso del ataque que mató un bebé el viernes pasado.
Se trata de Mordechai Meyer, un colono que vive en un asentamiento judío en la Cisjordania ocupada.
Esta es la primera aplicación de la polémica medida gubernamental de cárcel sin juicio durante seis meses, la llamada “detención administrativa”.
El colono detenido está acusado de “participación en actividades violentas y en los ataques terroristas recientes como parte de un grupo terrorista judío”.
Para el gobierno israelí se trata de un asunto prioritario como explica el ministro de Defensa Moshe Yaalon: “Tenemos la intención de luchar contra el terrorismo judío sin pacto alguno. Esta es una lucha por la imagen del estado y no tenemos ninguna intención de rendirnos. El gabinete ha tomado algunas decisiones importantes, incluyendo mi recomendación para operar y llevar a cabo medidas drásticas de detención administrativa “.
El viernes pasado un grupo de extremistas judíos mató a un niño de 18 meses en un ataque con cócteles molotov a una casa particular.
El pequeño Alí quedó dentro de la vivienda atacada y murió quemado. Se trata de un suceso condenado por la comunidad internacional y las autoridades palestinas, que han instado a Israel a no dejar impunes los crímenes cometidos por colonos contra palestinos.