“Repugnante” y “vergonzoso”. De esta manera el Gobierno alemán ha tildado los incidentes xenófobos del fin de semana en Heidenau, en el este del
PUBLICIDAD“Repugnante” y “vergonzoso”. De esta manera el Gobierno alemán ha tildado los incidentes xenófobos del fin de semana en Heidenau, en el este del país. Allí tuvo lugar una manifestación contra la llegada de 250 inmigrantes que iban a ser alojados en un edificio desocupado de la ciudad. Una marcha que se volvió violenta tras un enfrentamiento entre un grupo de neonazis y manifestantes de izquierdas que se solidarizaron con los inmigrantes.
El vicecanciller y titular de Economía, Sigmar Gabril, que visitó el recinto de acogida, se expresó de esta forma:
“Los militantes de extrema derecha no tienen nada que ver con Alemania. Creen que representan a la verdadera Alemania, pero son lo más opuesto que hay a un ciudadano alemán”, dijo.
Por otra parte, un incendio ha destruido un edificio vacío que debía convertirse en un hogar de refugiados en la localidad de Weissach im Tal, en el suroeste del país.
La policía está investigando las causas del fuego, aunque no descarta que se trate de un acto xenófobo.