Las tropas afganas, apoyadas por bombardeos aéreos de las fuerzas estadounidenses, han lanzado este martes un contraataque para intentar recuperar la
Las tropas afganas, apoyadas por bombardeos aéreos de las fuerzas estadounidenses, han lanzado este martes un contraataque para intentar recuperar la estratégica ciudad de Kunduz cuyo control ayer era arrebatado por los talibanes. La ofensiva de los insurgentes se produjo justo antes del primer aniversario en el poder del Gobierno de unidad presidido por Ashraf Gani, que en su campaña electoral prometió mejorar la seguridad en el país tras décadas de guerra.
Para revertir la situación el Gobierno afgano ha anunciado un despliegue de tropas terrestres con apoyo de la fuerza aérea.
Kunduz es la mayor ciudad del norte y una de las más pobladas y desarrolladas del país, además de un cruce de caminos vital para la economía afgana.
La OTAN mantiene en Afganistán unos 4.000 militares. Su función es asistir y capacitar a las tropas del país. Mientras tanto Estados Unidos continúa llevando a cabo una operación de combate que incluye 9.800 militares que permanecerán sobre el terreno, en principio, hasta final de año.
