Su viaje por Kenia, Uganda y la República Centroafricana ha girado en torno a los pobres que, ha dicho “saben ser felices con el vientre vacío”. Pese
PUBLICIDADSu viaje por Kenia, Uganda y la República Centroafricana ha girado en torno a los pobres que, ha dicho “saben ser felices con el vientre vacío”. Pese a que la última etapa de su periplo, Bangui, era consideraba de alto riesgo por los entrentamientos constantes entre cristianos y musulmanes, Jorge Bergoglio ha remarcado la voluntad de reconciliación.
“Me gustaría que se quedara con nosotros una semana más”, asegura una centroafricana.
“Con la llegada del papa, el país va a reponerse y las cosas irán mejor para la República Centroafricana”, comenta otra mujer.
El pontífice deja un continente que ha definido de “martir de la explotación” y ha fustigado el daño que causan ciertos programas de desarrollo.
En el avión que le trajo de vuelta al Italia, el pontífice se dirigió a los líderes del planeta reunidos en París en la cumbre sobre el cambio climático. El mundo está “al borde del suicidio”, ha dicho exhortando a los países a alcanzar un acuerdo que, en su opinión, es “ahora o nunca”