Decenas de miles de personas (100.000 según los organizadores y 25.000 según la policía) han ocupado la Plaza de la Gran Unión Nacional en una
PUBLICIDAD
Decenas de miles de personas (100.000 según los organizadores y 25.000 según la policía) han ocupado la Plaza de la Gran Unión Nacional en una manifestación sin precedentes en la que por primera vez han participado todos los partidos políticos moldavos, desde la derecha europeísta (Plataforma Dignidad y Justicia) a la izquierda prorrusa (Partido Socialista y Nuestro Partido) para exigir la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones anticipadas.
Consideran ilegal la investidura esta semana del Gobierno de Pavel Filip (es el sexto primer ministro del país en poco más de un año), apoyado por la UE y EEUU, por estar vinculado a un caso de corrupción que estalló hace casi un año.
Anunciaron la creación del Consejo de Salvación Nacional para pedir ala comunidad internacional que igual que hicieron en Rumanía, Ucrania y Turquía, “apoyen la lucha del pueblo contra el poder criminal” y dejen de apoyar en Moldavia “a la mafia”.
Las autoridades moldavas han pedido a la oposición que deje al menos 100 días al nuevo Gobierno trabajar.