El miedo se ha instalado en la costa suroeste australiana, tras el segundo ataque mortal de un tiburón en menos de una semana.
El miedo se ha instalado en la costa suroeste australiana, tras el segundo ataque mortal de un tiburón en menos de una semana. La víctima es una buceadora de 60 años, atacada en Mindarie, al norte de Perth. Su verdugo, un tiburón de más de cinco metros y medio, según el testimonio de tres pescadores que intentaron ayudar a la mujer.
60yo diver dead after #shark attack off Mindarie, fishermen say animal bigger than 5.3m boat https://t.co/EoF1Cei9Sdpic.twitter.com/fpoFN4XLGq
— ABC News Perth (@abcnewsPerth) 5 de junio de 2016
Este incidente se produce dos días después de que falleciera en el hospital un surfista, de 29 años, atacado el martes por un gran tiburón blanco en Falcon Beach, al sur de Perth, a un centenar de kilómetros de este segundo ataque. El escualo que lo mató fue capturado y sacrificado.
The first short board shark attack victim Ben Gerring learned to surf on, now a tribute to his life.
9NewsPerth</a> <a href="https://t.co/G9ti0zzMpb">pic.twitter.com/G9ti0zzMpb</a></p>— Hannah Sinclair (hansinclair_) 4 de junio de 2016
Surfing friends of Ben Gerring want beaches numbered to make it easier for them to be found in an emergency #7Newshttps://t.co/5n1Pj3PtPq
— 7 News Perth (@7NewsPerth) 5 de junio de 2016
En 2015, Australia alcanzó la cifra récord de 98 personas atacadas por tiburones. Este aumento responde a la creciente popularidad de los deportes náuticos, según los expertos, que recuerdan que los ataques mortales siguen siendo raros.
