Tras cinco años de misión, está previsto que esta madrugada la sonda Juno de la NASA intente entrar en la órbita de este planeta.
PUBLICIDAD
Tras cinco años de misión, está previsto que esta madrugada la sonda Juno de la NASA intente entrar en la órbita de este planeta.
Si lo consigue, podrá ofrecer respuestas a los misterios sobre el núcleo, composición y campo magnético de Júpiter: información que ayudará a comprender cómo se formaron los planetas gigantes y qué papel jugaron en la formación del resto del sistema solar.
“Hemos tenido una serie de sondas espaciales en Júpiter. Realmente la última que orbitó durante muchos años fue Galileo. Estudió el planeta, pero solo la superficie profunda, observando todas las lunas. Ahora con Juno tenemos la oportunidad de volver para hacer un estudio más exhaustivo”, explica Jim Green.
Con una inversión total de 1.300 millones de dólares y más de 3.600 kilos de peso, la misión de Juno ya ha alcanzado el hito de ser la nave que más se aproxima a Júpiter y la que más lejos ha llegado impulsada por energía solar.