Dilma Roussef está al borde del precipicio.
Dilma Roussef está al borde del precipicio. La comisión del Senado brasileño que estudia las presuntas irregularidades cometidas por la presidenta suspendida en la gestión de los presupuestos nacionales ha aprobado este jueves por catorce votos a favor y cinco en contra un informe que acusa a la mandataria de “atentar contra la Constitución”.
“Desafortunadamente”, decía el abogado de Rousseff y antiguo fiscal general, José Eduardo Cardozo, “lo que ha dominado en el debate han sido afirmaciones que no estaban basadas en hechos. Se ha preparado todo para que ella tenga que irse. Es lamentable, pero es la moyoría”.
Ese mismo informe se votará en el pleno de la Cámara Alta la semana que viene y una segunda vez a finales de agosto. Si el resultado se repite, Rousseff quedará definitivamente destituida de su cargo.
En ese escenario, el interino Michel Temer asumiría la Presidencia y completaría el mandato que concluye el 1 de enero de 2019.
Entre tanto, los partidarios de Rousseff preparan protestas por las calles de Río y un boicot contra Temer en la ceremonia de inaguruación de los Juegos que tendrá lugar en Maracaná.
