Escalada en el cruce de acusaciones por la radicalización del conflicto en este de Ukrania.
PUBLICIDADEscalada en el cruce de acusaciones por la radicalización del conflicto en este de Ukrania. Moscú y Kiev se hacen responsables mutuamente de las recientes muertes. A ello se une que las autoridades ucranianas han confirmado las informaciones OSCE sobre su envío de tanques al frente, argumentando que es una medida defensiva ante la creciente intensidad de los ataques prorrusos.
Las Fuerzas Armadas ucranianas han anunciado que tres de sus soldados han fallecido en las últimas 24 horas en los enfrentamientos, mientras que los separatistas responsabilizan por su parte a Kiev de la muerte en las últimas horas de dos civilies en bombardeos a Donetsk.
“Kiev no solo no expresa ninguna preocupación por la actual radicalización de la crisis y sus efectos a nivel humanitario. No asumen ninguna responsabilidad por lo que esta ocurriendo, y además alardean de sus acciones militares en Donbass”, decía Maria Zakharova, portavoz del Ministerio de Exteriores ruso.
Sin embargo, no solo ha habido fallecidos en la prorrusa Donetsk. Las autoridades ucranianas acusan a los rebeldes y a Moscú los muertos en zonas bajo su control, como Avdiivka, fruto de su renovada ofensiva.
Así lo reflejaba Oleksandr Motuzyanyk, portavoz del Ejército ucraniano: “Desde el pasado verano no hemos visto una actividad militar tan intensa. Tenemos informaciones de operaciones de combate del enemigo en prácticamente todo el frente, en tres direcciones distintas: Mariupol, Donetsk y Lugansk”.
Quien se ha alineado con Kiev ha sido Estados Unidos. Su embajadora ante la ONU Nikki Haley acusó a Rusia de ser la responsable de la reciente escalada de violencia en el este de Ucrania. Una acción inesperada dado el acercamiento entre ambos países tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca.