Después de tres años de ferreo dominio del autodenominado Estado Islámico, los habitantes del este de Mosul vuelven poco a poco a recuperar la normalidad.
Después de tres años de ferreo dominio del autodenominado Estado Islámico, los habitantes del este de Mosul vuelven poco a poco a recuperar la normalidad.
En el mercado de Al Naby Younis, la actividad comercial va recuperando su curso. Eso sí con la presencia de las fuerzas de seguridad que controlan la zona para que no haya problemas.
“Lo más importante es la seguridad. Cuando vivíamos bajo el Dáesh estabamos en peligro de muerte las 24 horas. No había comida ni bebida. Si un niño jugaba, lo mataban. No había nada”, decía un vecino del barrio.
“Lo más importante es que el autodenominado Estado Islámico se ha ido. Cuando tengamos agua y electricidad y arreglen un poco esto la vida volverá a ser como antes”, añadía otro.
A pesar de la tranquilidad que se respira en esta zona de la segunda ciudad del país, todavia hay muchas carencias.
Los bombardeos de la coalición han dejado gran parte de la urbe en ruinas y los cortes de electricidad son bastante frecuentes, al igual que la escasez de agua potable.