China y Corea del Sur están de acuerdo en endurecer las sanciones contra Pyongyang, si éste último continúa con su programa nuclear y de misiles.
PUBLICIDADChina y Corea del Sur están de acuerdo en endurecer las sanciones contra Pyongyang, si éste último continúa con su programa nuclear y de misiles.
Es uno de los mensajes que se desprenden de la reunión este lunes entre los ministros de Defensa de ambos países, días después de que Estados Unidos enviara un portaviones a la Península de Corea, en respuesta a las recientes pruebas de misiles del régimen norcoreano.
Para el Gobierno surcoreano, la respuesta de Washington para frenar la amenaza nuclear de Pyongyang es bastante normal:
“Es comprensible que Estados Unidos y Corea del Sur se preparen ante los posibles desafíos de Corea del Norte dada la estrategia de provocaciones de Pyongyang, entre las que se incluyen las pruebas nucleares y de misiles, que van en aumento”, ha manifestado Moon Sang Gyun, portavoz del ministro surcoreano de Defensa.
Seúl considera que Pyongyang podría realizar pronto una nueva prueba de misiles nuclear, de cara a las dos efemérides que celebra este mes, entre ellas el 105 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung (fundador del país).
Su principal aliado, China, insiste en que hay que mantener la calma.
“Estamos siguiendo muy de cerca la situación en la península. Ahora, lo más importante es que actuemos con moderación para evitar una escalada de tensiones”, ha señalado Hua Chunying, la portavoz del ministro chino de Defensa.
China ya dijo la semana pasada que no veía “ninguna conexión obvia” entre el lanzamiento del misil de Corea del Norte y la reunión entre el presidente de China Xi Jinping y el presidente de Estados Unidos Donald Trump.