Ringling Bros and Barnum & Barley era mucho más que un circo, era una auténtica institución en Estados Unidos. Durante 146 años ha emocionado a pequeños y grandes con sus espectáculos formidables, con decenas de artistas y animales de todo tipo. Una historia de éxito que ha tocado a su fin. El “espectáculo más grande del mundo” ha bajado el telón porque ya no era rentable.
Después de la última representación, el público se va cabizbajo y triste. “Ha sido triste. Impresionante, pero triste. Mi hija lloraba al salir y decía: mamá, ¿por qué tiene que cerrar? “, comenta una mujer. “La última vez que vine tenía ocho años. Ahora tengo 43. Tenía que venir con los niños para verlo por última vez”, añade un hombre.
Los responsables echan la culpa los defensores de los animales, bajo cuya presión los elefantes fueron retirados de escena hace un año. Y sin los paquidermos, parte del público dejó de venir. No habrá más números de tigres, caballos o perros, pero tampoco trapecistas, acróbatas ni payasos. El circo que inspiró “Dumbo” ya no existe.