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La televisión progubernamental del régimen sirio publica imágenes del niño que representaba el horror que estaban viviendo los ciudadanos de Alepo el verano pasado.
Omran aparecía lleno de sangre y polvo, sentado en una silla de una ambulancia después de haber sobrevivido a un bombardeo por parte del ejército sirio que destruyó parte del inmueble en el que vivía.
Su cuerpo petrificado y su mirada perdida mostraba el horror al que se enfrentaban los residentes de esta ciudad del noroeste del país árabe durante el verano de 2016.
Después de pasar un día en el hospital, Omran se fue con su familia y no se volvió a saber nada más de él.
Ahora la televisión Al Mayadeen TV muestra unas imágenes del pequeño con su familia en el que se aprecia su buen estado de salud.
Algunas imágenes del niño y su familia fueron publicadas por la presentadora Kinana Allouche.
Mohammed Daqneesh, el padre del niño, dijo ante las cámaras que el Omran había sufrido heridas leves a raíz del ataque y que había sido trasladado al hospital sin su consentimiento.