PUBLICIDADFrancia decide en los próximos días como queda distribuida su Asamblea Nacional. Las elecciones legislativas, que se celebrarán a dos vueltas este domingo y el siguiente, se presentan como un nuevo capítulo para el parlamento francés: Hasta 200 diputados abandonan definitivamente sus asientos.
Se prevé que haya además cambios significativos en el reparto. La debacle del partido socialista en las generales apunta a que se quedará muy lejos de los 314 escaños que sumó junto a sus aliados en 2012, mientras que
la derecha peleará por convertirse en la principal fuerza de la oposición, aunque probablemente consiga muchos menos de los más de 200 asientos de la pasada legislatura. El Frente Nacional podría llegar hasta los 15 diputados según los últimos sondeos.
Todo este terremoto político tiene nombre y apellido: Emmanuel Macron y su nuevo partido ‘La Republica en Marcha’, que tras arrasar en las presidenciales persigue ahora una mayoría absoluta que le permita llevar
a cabo su programa sin ningún tipo de trabas.
Los Republicanos se presentan a las legislativas con Francois Baroin a la cabeza, mientras que el Frente Nacional estará liderado por una Marine Le Pen consciente de que sus resultados no serán, a priori, tan benévolos como
los obtenidos en las presidenciales.
Según los medios franceses, se espera una de las abstenciones más altas de la historia de la república.