Al menos dos muertos en Texas tras el devastador paso del huracán Harvey por el triángulo formado por las ciudades de Houston, San Antonio y Corpus Christi. Degradado a tormenta tropical deja un rastro de tornados, casas arrancadas de cuajo de sus cimientos e incendios, como el que provocó la muerte de un hombre el viernes por la noche en Rockport.
Su capacidad de destrucción es tal que nadie había visto nada igual en medio siglo.
Muchas carreteras y autopistas del área de Houston, como la Interestatal 10, han quedado inundadas y muchos coches han quedado atrapados, como el de una mujer que murió ahogada. Además hay docenas de heridos, según la policía.
Los equipos de emergencia trabajan sin descanso para rescatar a todos los afectados y evacuar las zonas inundables porque las fuertes lluvias continúan. De hecho, se ha superado el récord de precipitación en veinticuatro horas, registrado hace casi cuarenta años.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha ordenado el despliegue de 1.800 soladados en la zona.
Con Reuters