El dramaturgo catalán ha sido investido presidente del movimiento anti independentista que pide la escisión de Barcelona y Tarragona.
PUBLICIDADEn la primera rueda de prensa oficial del fenómeno Tabarnia, Albert Boadella ha sido investido "president" de la ficticia región autónoma conformada por Barcelona y Tarragona, en respuesta al independentismo catalán ¿Quién es y por qué defiende esta causa?
Natural de Barcelona, Boadella es un actor y dramaturgo catalán de 74 años, muy conocido por haber cofundado en 1962, y dirigido hasta 2012, la mítica compañía de teatro independiente Els Joglars ("Los juglares").
Afincada en el campo de la provincia de Barcelona, *Els Joglars *se caracteriza por el espíritu crítico de sus producciones, en ocasiones vetadas por las televisiones públicas, tanto por la catalana TV3 durante el gobierno de Jordi Pujol (1980-2003), como por TVE, bajo el mandato de José María Aznar (1996-2004).
Boadella, considerado "el abuelo" de la compañía, escribió un ensayo autobiográfico en 2007 titulado "Adiós Cataluña. Crónicas de amor y de guerra", en el que anunció que nunca más volvería a trabajar en su región de origen, porque "hay un problema de libertad".
Cercano a posturas catalanistas en su juventud, Boadella fue, no obstante, uno de los promotores intelectuales en 2006 de la plataforma Ciutadans de Catalunya, semilla del partido político Ciudadanos.
Sin embargo, más tarde se ha mostrado crítico con esta formación política a la que acusó de “haber perdido fuelle en Cataluña al intentar obtener cierta adhesión del catalanismo moderado", en una entrevista con El Español. “Hace muy poco tiempo disfrutaron de una situación estratégica para convertirse en la formación decisiva de la España actual. No tuvieron astucia para aprovecharlo", añadió.
"Cuando viajo al extranjero, digo que soy de Murcia o de por ahí...", respondía en otra entrevista a El Mundo, el pasado mes de septiembre, confirmando su desapego con la actual situación en Cataluña.
Ahora, Boadella se acaba de convertir en la cara pública de Tabarnia, al ser nombrado "president" y pronunciar su primer discurso telemático "en el exilio".