A medida que prosigue el rescate de los cuerpos y fragmentos del avión que se estrelló este domingo en las afueras de Moscú, aumentan las hipótesis sobre la posible incidencia del hielo en el siniestro que costó la vida a 71 personas.
Aunque las autoridades rusas no han anticipado ninguna hipótesis sobre las causas del siniestro, la presencia excesiva de hielo en las alas pudo ser determinante según Andrei Krasnoperov, piloto e instructor de vuelo.
Andrei Krasnoperov, piloto e instructor de vuelo: "La trayectoria podría indicar que el piloto voló en instrumental. Aparentemente algo iba mal, tal vez fuera la acumulación de hielo. Hay una formación de hielo normal y una fuerte; la fuerte significa que hay tanto hielo en el avión que puede alterar la alineación. El hielo es muy pesado, y ni siquiera me refiero al que podría haber entrado en el motor y pararlo. De hecho el hielo puede parar los dos motores. El avión estaba cayendo sin ningún control. Y si temblaba al mismo tiempo, significa que cayó, descendió de las nubes, como una hoja muerta en pocos segundos".
Algunas agencias señalan que el comandante del avión siniestrado rechazó el procedimiento de deshielo antes del despegue al juzgar que las condiciones meteorológicas no lo hacían necesario.
