La resurrección de Poiret en la pasarela de París

La histórica "maison" Paul Poiret escenificó su resurrección en la pasarela casi un siglo después de su cierre de la mano de la diseñadora china Yiqing Yin y con la mirada puesta en el mercado asiático. La colección recupera la extravagancia de la casa en clave contemporánea.
En un escenario místico, invadido por humo artificial y luces azules, las telas de las creaciones se impusieron sobre siluetas anchas, con parkas y grandes abrigos.
La brillantina, convertida en joya en los rostros de las modelos, marcó el desfile de Giambastista Valli. La colección del creador es un caleidoscopio de motivos y lujosas texturas, con acentos hippies y algunos toques andróginos.
Hèrmes y Stella McCartney, con un cóctel entre clásico y kitsch, también dejaron su huella en la jornada de una semana de la moda que este martes llega a su fin.