La Fiscalía alemana decide a partir de este martes si extradita o no a España al líder independentista catalán Carles Puigdemont, que fue detenido el pasado 25 de marzo en virtud de una euroorden dictada por el juez Llarena.
La Justicia alemana decide a partir de este martes la suerte de Carles Puigdemont, que sigue encarcelado en la prisión de Neumuenster. Gracias a la visita del diputado Diether Dehm, de la formación izquierdista Die Linke, sabemos que tiene miedo a ser extraditado y encarcelado en España. Este mismo político ha difundido una grabación en la que el exmandatario catalán afirma que nunca buscó la independencia por vías violentas:
"En los tribunales españoles", decía Puigdemont, "hay muchos expertos que no apoyan la independencia y que dicen que aquí no hay caso, que es claramente un abuso. Porque la rebelión implica usar la violencia y las armas. Y nosotros siempre actuamos y buscamos caminos no violentos, al modo catalán, sin violencia. Es un compromiso profundamente enraizado en el alma catalana", sentencia.
Sus abogados reconocen algunos excesos
Al tiempo que se divulgaban estas grabaciones, los abogados de Puigdemont han presentado un recurso contra el auto de procesamiento del juez Llarena en el que se reitera que el día del referéndum no hubo violencia, aunque se reconoce que "algunos ciudadanos" pudieron haberse excedido en su resistencia pasiva contra los agentes. El mismo escrito denuncia que el auto de procesamiento compare con una "toma de rehenes" las protestas que se registraron la noche del 20 de septiembre contra los agentes de la Guardia Civil en la sede de la Conselleria de Economía.
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