Con Torres se va parte de la historia reciente del Atlético de Madrid. Para el jugador de Fuenlabrada, tener que dejar el que define como su "hogar" supone uno de los momentos más complicados de su vida deportiva y también personal
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Con Fernando Torres se va parte de la historia reciente del Atlético de Madrid. Para el delantero de Fuenlabrada, tener que dejar el que define como su "hogar" supone uno de los momentos más complicados de su vida deportiva y también personal. El "niño" siempre será 'santo y seña' del equipo "colchonero".
"Es una decisión que no ha sido sencilla. Me ha costado mucho tomarla pero, bueno, viendo un poco la realidad y las circunstancias, quizá sea lo mejor", afirmaba Torres al anunciar su futura salida del Atlético de Madrid.
El delantero español tiene por delante seis semanas para dar guerra con los "rojiblancos" en la liga española de fútbol y en la competicón europea, donde aspira a ganar el título de campeón de la Liga Europa. Misiones para las que espera contar con el apoyo de los aficionados.
"Nos queda un mes y un poquito más juntos. Y yo nunca les he pedido nada. Siempre me dicen, ¿qué le pides a la afición? No se le puede pedir nada pero ahora le pediría que en este mes y poco que queda, que me acompañen, que ésté conmigo. Nos quedan muchos partidos en casa que jugar y entre todos tenemos que hacerlo lo más llevadero posible porque cuando acabe la temporada, será el final", señalaba el jugador madrileño.
Llegado al Atlético de Madrid con apenas 10 años, Fernando Torres se ganó un hueco en el corazón de los aficionados. Tras pasar por el Liverpool, el Chelsea, y el Milán, volvió a "casa" en 2015. Ganador de numerosos títulos, entre ellos dos Eurocopas y un Mundial, no encaja en los planes de Simeone. Con 34 años, decidirá en breve un futuro que algunos ven en China y otros en Estados Unidos.