Muchas compañías europeas están abandonando Irán por temor a las represalias de EE.UU. después de que el presidente Donald Trump anunciase la retirada de su país del acuerdo antinuclear firmado en enero de 2016 por el país islámico y las seis grandes potencias mundiales.
PUBLICIDADMuchas compañías europeas han decidido abandonar Irán por temor a las represalias de EE.UU. después de que el presidente Donald Trump anunciase la retirada de su país del acuerdo antinuclear firmado en enero de 2016 por el país islámico y las seis grandes potencias mundiales.
Entre las multinacionales se encuentran el fabricante alemán Siemens, la compañía naviera danesa MERSK, el fabricante de coches francés Peugeot o el gigante de la energía Energy Total.
Todas estas compañías han decidido reducir su presencia o retirarse de Irán por miedo a las sanciones estadounidenses.
Muchas de estas compañías decidieron invertir en el país tras el acuerdo antinuclear para encontrar nuevas oportunidades de negocio pero ahora dicen que se marchan.
En su comunicado, el gigante francés Energy Total ha dicho que iban a dejar de operar en el país a menos que las autoridades estadounidenses se echaran hacia atrás y daban dan tres razones. La primera es que dejarán de ser financiados por bancos estadounidenses, la segunda es la pérdida de accionistas norteamericanos, y finalmente la pérdida del acceso a los mercados estadounidenses. Ese es básicamente el dilema al que en este momento se están enfrentando todas las compañías europeas que pueden seguir haciendo negocios con Irán pero eso significaría que dirían adiós a cualquier relación comercial con los EEUU en el futuro.
EE.UU. no sólo es un mercado mucho más grande, sino que también controla muchas transacciones de la economía global, que se hacen en dólares.
Para todas estas compañías es muy peligroso continuar operando con Irán y esa es la razón por la que muchas de ellas han decidido retirarse