En el Reino Unido ya están acostumbrados al lenguaje colorido de Boris Johnson aunque de vez en cuando, tal y como ha sucedido en esta ocasión, cruce la línea. Los críticas más duras han procedido de su propio partido, incluyendo a la Primera Ministra, Theresa May.
PUBLICIDADEn el Reino Unido ya están acostumbrados al lenguaje colorido de Boris Johnson aunque de vez en cuando, tal y como ha sucedido en esta ocasión al comparar a las mujeres musulmanas que usan burka con buzones y ladrones de banco, cruce la línea.
Los miembros del partido conservador han sido los más críticos con Boris Johnson.
Alistair Burt, miembro del Ministerio de Asuntos Exteriores afirmó que sus declaraciones fueron insultantes.
Brandon Lewis, presidente del partido conservador, declaró que debería disculparse y también Lord Singh, miembro conservador de la Cámara de los Lores, afirmó que se debería retirar a Boris Johnson del partido durante un periodo de tiempo.
La última persona que ha condenado las declaraciones de Johnson ha sido la Primera Ministra Theresa May al declarar que "el gobierno y yo creemos que la cuestión de cómo debería vestir una mujer es una elección individual de cada mujer. Nadie debería decirle a una mujer cómo debe vestirse. Mientras que hablemos de estos temas abiertamente es imprescindible que todo el mundo tenga cuidado con el lenguaje que utiliza. Está muy claro que el lenguaje que ha utilizado Boris Johnson para describir el aspecto de las personas ha causado una ofensa. No es un lenguaje que yo hubiera utilizado y creo que fue un error usar ese lenguaje".
Fuentes cercanas a Boris Johnson afirman que, a pesar de las críticas de la Primera Ministra, no se va a disculpar por su lenguaje.
Tenemos que tener en cuenta que sigue siendo un rival para May y se cree que podría intentar "derribarla" más adelante cuando la Primera Ministra esté completamente inmersa en las negociaciones del Brexit.
Otra de las voces que se han alzado en esta controversia ha sido la de la Baronesa Sayeeda Warsi, primera mujer musulmana del gobierno británico y antigua presidenta del partido conservador que ha afirmado que con estos comentarios Boris sabe lo que está haciendo y que su forma de hablar racista está diseñada para conseguir el apoyo de los más conservadores.
Warsi ha reclamado recientemente una investigación contra la islamofobia dentro del partido conservador.
Boris Johson en estos momentos se encuentra de vacaciones pero no sería la primera vez que tiene que disculparse. En el pasado ya tuvo que pedir perdón por comentarios machistas en la Cámara de los Comunes, por comentarios racistas dirigidos a otros países de la Commonwealth, a la ciudad de Liverpool por alegaciones falsas sobre Hillsborough, y también contra la secretaria de asuntos exteriores de Gales por unas declaraciones relacionadas con el caso de Nazanin Zaghari Ratcliffe.