Los líderes de la Unión Europea se reúnen hoy y mañana en la cumbre de Salzburgo con las negociaciones del Brexit entre los puntos más importantes de la agenda.
PUBLICIDADLos líderes de la Unión Europea se reúnen hoy y mañana en Salzburgo con las negociaciones del Brexit entre los puntos más importantes de la agenda.
Hay que recordar que las dos partes se juegan mucho en estas negociaciones. Después de unas conversaciones que duran meses y años, ambos lados quieren llegar a un acuerdo.
Pero las conversaciones respecto a la frontera de Irlanda son un punto complicado. Michele Barnier, encargado de las negociaciones de la Comisión Europea con el Reino Unido, ha hecho algunas modificaciones a su propuesta sobre este tema pero aún queda por ver la opinión del Reino Unido.
Habrá que ver qué es lo que terminará ganando el gobierno del Reino Unido de todo esto y si se puede superar este escollo sobre la frontera irlandesa, que es lo que realmente se interpone en el camino de llegar a un acuerdo en este momento.
Ambas partes quieren un acuerdo bajo sus propias condiciones y ese es el problema. La cena que se celebrará en Salzburgo esta noche es una buena oportunidad para que Theresa May converse con los líderes de la Unión Europea y obenga una imagen general sobre ese acuerdo de comercio que quiere conseguir de este acuerdo.
Esta noche en Salzburgo es la primera vez que los líderes de la UE se sientan juntos desde esas propuestas de Chequers para el Brexit por lo que es un momento importante para May.
El presidente del Consejo Europeo Donald Tusk afirmó antes de que tuviera lugar esta cumbre de los líderes europeos en Salzburgo que esperan llegar a un acuerdo en esta última fase de las negociaciones.
También ha publicado en su cuenta de twitter que "limitar el daño causado por el Brexit es de común interés aunque un escenario sin acuerdo todavía es bastante posible". Sin embargo Tusk también afirmaba que si todos actuaban responsablemente, se podrá evitar una catástrofe.
Pero va a ser necesario algo más que una copa de vino blanco y un chuletón para limar las diferencias esta noche en Salzburgo.