Las calles reaccionan ante el avance de la ultraderecha en Brasil tras el primer sondeo antes de la segunda vuelta del 28 de octubre. El líder ultraderechista ganaría el 58% de apoyos y miles de personas han salido para protestar.
PUBLICIDADLas calles reaccionan ante el avance de la ultraderecha en Brasil tras el primer sondeo antes de la segunda vuelta del 28 de octubre. El líder ultraderechista gana en la encuesta el 58% de apoyos y miles de personas han salido para protestar. Temen que regrese la dictadura.
Las declaraciones homófobas, racistas y machistas de Jair Bolsonaro han conseguido que la izquierda se una contra él. Ahora el reto para sobrepasar al Partido Social Liberal en las encuestas lo tiene el líder del Partido de los trabajadores, Fernando Haddad.
Haddad ha cambiado su imagen y ya no es el sucesor de Lula da Silva en las redes sociales. El partido esta 16 puntos por debajo de Bolsonaro en los sondeos y cualquier estrategia es válida para avanzar en las encuentas.
Fernando Haddad se refería así hacia su contricante: "el dijo que no quería estar estresado. No lo voy a estresar. Hablaré de la forma más tranquila posible. No levantaré la voz si es lo que quiere; o ni si quiera lo miraré, si eso es todo lo que le preocupa. Haré lo que quiera si eso significa debatir sobre el país. Debatiré con él donde quiera, con asistencia médica o en la enfermería."
Un cara a cara sería una oportunidad para Haddad; pero según los doctores de Bolsonaro, el líder ultraderechista aún se tiene que recuperar de la puñalada que recibió durante la campaña y no creen que pueda estar preparado para el debate que estaba previsto para este viernes.