El funeral de Estado en Washington reúne a muchos mandatarios y exmandatarios internacionales
PUBLICIDADEl féretro del expresidente George Bush llegaba en la noche del miércoles a Texas para un funeral privado. Por su capilla ardiente han pasado decenas de personas.
Bush descansará ahora al lado de su mujer Bárbara en la biblioteca presidencial que lleva su nombre.
Al funeral de Estado al cuadragésimo primer presidente, en el cargo entre 1989 y 1993, acudieron expresidentes y líderes mundiales, varios de ellos de los que coincidieron con él en la escena internacional.
También el actua presidente, Donald Trump, y su esposa Melania, lo cual dio pie a varios saludos tensos entre mandatarios. Bush había insistido en que se invitara al actual ocupante de la Casa Blanca a pesar de los choques entre las dos familias.
Su hijo mayor, George W Bush le ofreció un emocionado tributo: "Así que a través de nuestras lágrimas, que conozcamos las bendiciones de haberte conocido y amado. Un hombre noble y grande. El mejor padre que un hijo o hija hubiera podido tener. Y en nuestro luto, déjanos sonreir sabiendo que papá está abrazando a Robin y dándole la mano a mamá de nuevo".
Tras mencionar a su madre fallecida y a su hermana, que murió cuando tenía tres años, Bush dio una afectuosa palmada sobre el ataúd de su padre.