La economía británica se ha desacelerado en los últimos meses afectada por la incertidumbre del Brexit. Así, los índices descendieron entre los meses de agosto y octubre; cayeron las ventas de automóviles y se produjeron parones en las fábricas debido a una demanda más débil
PUBLICIDADPierde velocidad. La economía británica se ha desacelerado en los últimos meses afectada por la incertidumbre del Brexit. Así, los índices descendieron entre los meses de agosto y octubre; cayeron las ventas de automóviles y se produjeron parones en las fábricas debido a una demanda más débil. Surgen dudas sobre la salud de la economía local antes de que el Reino Unido abandone la Unión Europea y las cifras de negocios se resienten tras varios meses consecutivos al alza. Como señalan en la Cámara de Comercio Británica, "los últimos datos del PIB son una prueba más de que el efecto de arrastre de la persistente incertidumbre del Brexit y las importantes presiones de costes a las que se enfrentan los consumidores y las empresas afectan a la economía del Reino Unido". La libra esterlina ha descendido a su nivel más bajo frente al dólar, desde junio de 2017, lastrada por las incertidumbres de última hora. La gran preocupación del mundo empresarial es que mientras el futuro del Reino Unido sea incierto más va a sufrir la economía y más se va a estancar el crecimiento.