La huelga de lunes provocó 1.400 cancelaciones en solo cuatro horas.
Los sindicatos ferroviarios alemanes dan un oportunidad a la negociación. Tras la huelga de este lunes, que en solo cuatro horas ha provocado 1.400 cancelaciones de trenes, la entidad que representa a los trabajadores se reúne el martes por la tarde con representantes de la empresa titular. El paro llega en un momento en el que Deutsche Bahn está bajo presiones para contratar más empleados y modernizar los trenes que causan frecuentes retrasos.
"El gran número de participantes en esta huelga, y también sus consecuencias, demostraron claramente el alcance del enfado de nuestros colegas. Esperan un salario decente y una apreciación de su trabajo diario en condiciones difíciles", explica Torsten Westphal, líder del sindicato EVG.
Los sindicatos piden una subida del 7,5 en los sueldos para los 160.000 trabajadores del sector que quieren en trozo pastel de los beneficios que la locomotora europea ha ido recogiendo en los pasados nueve años. E pasado año ya hubo subidas salariales significativas en Alemania. Algunos usuarios señalan que nadie recibe un aumento tan alto y se que de que los trenes no están funcionando.
Las negociaciones quedaron suspendidas el pasado sábado y, a pesar de haber dado un respiro, los sindicatos no descartan nuevos paros en la Navidad, uno de los periodos del año en los que hay mayor número de desplazamientos.
