La ciudad de Gdansk despidió al que fuera su alcalde durante 20 años, asesinado a puñaladas por un exconvicto el pasado domingo.
PUBLICIDADTratando aún de asimilar lo ocurrido, Polonia despidió este jueves a Pawel Adamovicz, el alcalde la Gdansk asesinado el domingo durante un acto benéfico.
A pesar de las bajas temperaturas y el fuerte viento, miles de personas se acercaron a la capilla ardiente del que fuera uno de los políticos más reconocidos del país, alcalde de la ciudad portuaria durante 20 años y ganador en las últimas elecciones con un 65% de los votos. El Gobierno ha decretado un día de luto oficial, las banderas ondearán a media asta y los eventos públicos masivos quedaran suspendidos durante hasta el sábado.
Adamovicz recibía el pasado domingo una puñalada en el corazón a manos de un exconvicto que actuaba, según dijo, en venganza por haber sido injustamente encarcelado. A lo largo de la semana, la policía ha detenido a varias personas acusadas de delito de odio por manifestar en redes sociales su deseo de que continúen este tipo de ataques contra políticos.
Adamowicz, miembro el principal partido de la oposición del país Plataforma Ciudadana, era una de las figuras más comprometidas del país, crítico con el partido gobernante Ley y Justicia y sus polémicas reformas y claramente favorable a la acogida de refugiados, posiciones que le granjearon más de un enemigo en los sectores más radicales.
El año pasado el grupo de ultraderecha Juventud Polaca emitía un certificado de defunción falso para once alcaldes liberales, entre ellos Adamowicz, y entre las causas de su muerte simbólica se enumeraba el "liberalismo, multiculturalismo y la estupidez".