Dolor y muchos interrogantes por el drama sufrido en el club de fútbol más popular de Brasil.
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Luto en el fútbol brasileño y muchos interrogantes. Diez jugadores de la cantera del Flamengo, el club más popular de Brasil, perdieron la vida en un incendio en las instalaciones de un centro de entrenamiento, en Río de Janeiro, que, al parecer, se había construido sin licencia. Tenían entre 14 y 16 años.
Las llamas se desataron sobre las cinco de la madrugada y calcinaron por completo un alojamiento donde dormían cerca de 30 jugadores. Además de los diez fallecidos, otros tres menores de la cantera del Flamengo resultaron heridos. Dos se encuentran "estables" y otro en "estado gravísimo", con quemaduras de tercer grado en cerca del 35% de su cuerpo.
"Independientemente de cual sea tu equipo de fútbol, todo el mundo está muy triste con lo ocurrido y no hay palabras para explicarlo", dice un aficionado.
"Me pongo en la piel de un padre que ha perdido a su hijo, seas o no afionado al fútbol. Creo que es un momento para mostrar solidaridad con las familias", señala otro.
El delantero del Flamengo Weverton Sousa, de 16 años, ha publicado un vídeo en Twitter de uno de los dormitorios. En él aparece Athila Paixao, con una chaqueta roja, que es uno de los diez fallecidos.
"Es como si el suelo desapareciera bajo tus pies. Muchas veces no encontramos palabras para momentos como éste. Especialmente con esos niños, a los que estuve viendo jugar el año pasado", explica Zico, exjugador del Flamengo.
Las muestras de solidaridad se suceden en las redes sociales. Varios de los astros brasileños del denominado deporte rey se han sumado a ellas.