Después de que el presidente Donald Trump firmase este lunes su reconocimiento de Israel como soberano de los Altos del Golan. Siria y Turquía han rechazado una firma que consideran inválida y contradictoria con la legislación internacional.
PUBLICIDADDespués de que el presidente Donald Trump firmase este lunes su reconocimiento de Israel como soberano de los Altos del Golán, Siria y Turquía han rechazado su decisión, a la que consideran inválida y contraria a la legislación internacional.
El reconocimiento supone otro espaldarazo al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu a dos semanas de las elecciones del país. Ambos consideran que el territorio es importante para la seguridad del país.
"Estoy tomando una acción histórica para promover la habilidad de Israel de defenderse y tener de verdad la fuerza nacional fuerte y segura que tienen derecho a tener", explicaba Trump poco después de firmar el documento.
"En el largo recorrido de la historia judía ha habido un puñado de proclamaciones de líderes no judíos en nombre del nuestro pueblo en nuestras tierras. Ciro el Grande, el Gran Rey Persa, Lord Balfour, el Presidente Harry S. Truman y el Presidente Donald J. Trump", afirmaba Netanyahu.
Los Altos del Golán son el terreno entre Siria e Israel, que el último ocupó tras la Guerra de los Seis Días en 1967. El reconocimiento de su soberanía por parte de Estados Unidos ha levantado ampollas entre algunos países como Siria, cuyo ministro de Exteriores, Walid Al-Moualem, entiende que se trata de una firma sin validez que solo aislará a Estados Unidos.
En la misma línea se expresaba el ministro de Exteriores turco Mevlut Cavusoglu: "La firma no legitima la ocupación de Israel. No vamos a aceptar una decisión de los Estados Unidos que no reconoce la legislación internacional. Turquía hará todo lo posible para oponerse a ello, no vamos a aceptar esta decisión unilateral"
Además, Siria insiste en que no llegará a un acuerdo de paz con Israel a menos que se retire de todo el Golán. Sin embargo, Netanyahu ha declarado que nunca se rendirá. La anexión del territorio tuvo lugar años después de su ocupación, una acción que no fue reconocida por la comunidad internacional. Algunos países entre los que se encuentra España, no reconocen la validez del reconocimiento de Estados Unidos en este asunto.