Con la economía decayendo, el presidente se juega una parte del prestigio en los comicios de este domingo
PUBLICIDADRecep Tayip Erdogan libra su batalla particular batalla contra los minoristas a pocos días de los comicios locales del domingo. En mitad del creciente coste de los alimentos, los puestos gestionados por el Gobierno turco ofrecen comida a precios reducidos. Lo que para los críticos demuestra el empeoramiento de la economía, para el Ejecutivo es una respuesta a quienes quieren aprovecharse de los consumidores.
Un comprador asegura que los problemas en las cuentas del país son ciertos, pero se alegra de que el Estado encuentre una solución. mientras que un jubilado considera que la medida es importante porque "la pensión no es suficiente para el día a día".
La lira turca cayó el pasado verano como consecuencia de la crisis con Estados Unidos, lo que provocó inflación, aumento del precio de productos básicos y desempleo. Un fuerte contraste con tiempos pasados, cuando la gestión de Erdogan era sinónimo de crecimiento económico, y una situación que puede poner en problemas a la formación del mandatario en las elecciones locales de este domingo.
Su primer ministro Binali Yildrim opta a la alcaldía de Estambul. Y el presidente ha estado activo en los mítines de campaña. El principal partido de la oposición, el CHP, amenaza con hacerse con el control de la capital económica del país y también Ankara, la administrativa, ambas controladas por el AKP del presidente desde hace dos décadas.
Este distrito de Estambul no cuenta habitualmente con muchos seguidores de la oposición, pero el candidato del CHP Alper Taş espera que precisamente la economía juegue a su favor y que logren convencer a los conservadores.
El fuerte control de los medios hace que llegar a los votantes es clave para la oposición. Gurkan Ozturan dirge una agencia que velará porque los comicios se desarrollen con normalidad y opina que hay campañas anteriores que no han sido limpias: "La alianza gobernante ha usado de fondos y recursos públicos, mientras que a la oposición se le ha negado la igualdad de oportunidades en el acceso a los votantes· Ozturan enviará voluntarios a los centros electorales para comprobar que el recuento de votos se lleva a cabo sin trampas. La preocupación por el fraude ha conducido a algunos ciudadanos a reconsiderar su voto. "No se trata de ganar o perder, eso no tiene importancia", explica un hombre, "se trata de demostrar que existimos".
Aunque por supuesto ganar es importante tanto para Erdogan como para la oposición. Y una gran derrota del presidente podría ser vista como un reflejo de las dudas sobre su liderazgo.