El Partido Popular de Kurz no tiene mayoría por lo que la clave está ahora en comprobar con quién formará Gobierno: con los Verdes, con los socialdemócratas o con el polémico FPÖ.
PUBLICIDADAlegría en el Partido Popular austriaco tras la reelección de Sebastian Kurz en las legislativas. Logra un 37% de los votos, a falta del recuento de 1 millón que fue enviado por correo. Le siguen los socialdemócratas con un 21,8%, los ultranacionalistas del FPÖ que caen a un 16%, castigados por sus casos de corrupción y los Verdes con un 14,3% de los apoyos.
En la sede del Partido Popular sólo había alegría y dudas sobre cómo y con quién se llevará a cabo la formaci´on de Gobierno. "Increíble, no tengo palabras en este momento", exclamaba una joven. "Fenomenal, como se esperaba!" afirmaba una señora presente en la sede del partido. "Un resultado récord genial. Veamos ahora en qué quedan las negociaciones para una coalición. Las dos próximas semanas serán muy interesantes", contaba un joven. A lo que otro hombre añadía: "Espero que la coalición no esté formada por el FPÖ".
Pese a haber logrado más diputados que hace 2 años, Kurz no cuenta con mayoría absoluta. Podría pactar con los Verdes, que entran con fuerza en el Parlamento austriaco tras quedarse fuera en las pasadas elecciones pero ambos disienten en asuntos como el clima y la política migratoria. Las otras dos opciones son los socialdemócratas, o el polémico FPÖ con quien gobernó en coalición hasta su ruptura el pasado mayo después de la implicación de varios de sus socios en el corrupto Caso Ibiza.
"Sebastian Kurz ha ganado las elecciones, tal y como todos esperaban. Lo que sorprende, sin embargo, es el mal resultado obtenido por el FPÖ y el bueno alcanzado por los Verdes. Una cosa está clara: en los próximos años, Austria será conservadora ya que una coalición sin Sebastián Kurz es bastante imposible", analiza el corresponsal de Euronews en Austria.